Querido, “hubos” hubo muchos pero no fueron tuyos. Pero “ahoras” sólo hay uno y te pertenece.
Todos los días sonrío, o es que no lo ves: unos días al derecho, otros al revés.
La atracción de la luna siempre me pareció aterradoramente atractiva: como una buena mujer.
El burdo burdel de El Llano ya no ofrece masajes a cuatro manos.
No sé a quién busco aquí, Padre: si lo estoy buscando a Él o me estoy buscando a mí.
Los que más nos esforzamos en esto del vivir, te lo digo como si pudiera verlo, hemos visto a alguien dejar de hacerlo.
Dejaremos de complicarnos la vida sin sentido el día que nos llamen simple y nos parezca un cumplido.
El bus veinte va como si no quisiera llegar al final.
Voy a lanzarme a ver si existo: sin perdón, sin excusas, sin permiso.
Tu forma de diábolo, de reloj de arena tu perfil, contra mi alma de león y mis dientes de marfil.
Humano guarda secreto de sumario: llora por dentro.
Hijo, he aquí un hallazgo que te recomiendo no pasar de larg… ni olvidar: los humanos son bien lentos en dar… mas raudos cual rayo en recibir.
¿Sin ganas de vivir? Vive sin ganas. Las ganas de vivir se ganan viviendo.
No hay momento más letal que cuando la tóxica quemazón de la decepción se te hace familiar.
Nunca fue fácil enfrentarse a lo frágil: pero aquí estamos.