#luna #mujer #poesía
He aquí un hombre que se murió sin miedo a mirarse por dentro.
El cuerpo que te ha tocado es el resultado de una lotería que no has jugado.
Más vale poco si es honesto y genuino que mucho y falso.
Tus demonios internos se van a eternizar hasta que veas, que para vencerlos, los hay que abrazar.
No soy ningún –ista ni practico ningún –ismo: sólo soy un artista que piensa por sí mismo.
La procesión va por dentro, no por teatro.
La paciencia es la damisela que más se hace esperar y nunca termina por llegar
Hazlo aunque llueva, porque llueva o no llueva, no se hace solo.
Déjame que te cuente el lado oscuro del mercado: venderse a uno mismo está muy bien pagado.
¿Qué se supone que debe uno pensar si cuesta más leer y aprender de los fallos de los demás que beber y cometer los propios?
Hazlo o no lo hagas: no hay propósito alguno que te haga triunfar.
Vístete de aire, de brisa y ven a verme.
El bus veinte va como si no quisiera llegar al final.
Todos llorando por lo malo del mundo, como si no hubieran visto ni un gramo, de maldad. Y yo, sonrisa en mi cara,
Mientras el otoño llega y las hojas se tornan amarillo, yo me torno carajillo y me bebo,