#poesía
La procesión va por dentro, no por teatro.
Los ojos de Ella eran de esos que parecían poseer un pedacito de infinito
La nueva normalidad solo dejará de ser nueva cuando vuelva a ser normal.
No te preocupes, deja que la vida ocurra como ocurre la vida misma: orgánicamente.
Irrelevante: cuando nadas en el mar, la lluvia da igual.
La atracción de la luna siempre me pareció aterradoramente atractiva: como una buena mujer.
Humano guarda secreto de sumario: llora por dentro.
He aquí un hombre que se murió sin miedo a mirarse por dentro.
Cantar bajo la lluvia está sobrevalorado. Yo prefiero ser lluvia bailando en tu ventana: cantando en claqué
Caído una vez, levantado otra vez más: así es la vida.
Todos los días sonrío, o es que no lo ves: unos días al derecho, otros al revés.
No hay momento más letal que cuando la tóxica quemazón de la decepción se te hace familiar.
Déjame que te cuente el lado oscuro del mercado: venderse a uno mismo está muy bien pagado.
Todos llorando por lo malo del mundo, como si no hubieran visto ni un gramo, de maldad. Y yo, sonrisa en mi cara,
Todo el mundo quiere ser inmortal, pero nadie se ha molestado en leer la letra pequeña: para ser inmortal