#Españoles
Esta noche, por lo que a mí respecta bien podría saltar el mundo en mil pedazos. Por qué no. Y nosotros con él. Acabar. Echarle de una vez
Es lo que tiene, el amor: empiezas siendo el galán protagonista
Sale de la marquesina y mira hacia la izquierda; vuelve y reinicia su pequeño “claqueteo” nervioso. No aguanta más, se muere, necesita
Uno siempre espera que suceda algo, que algo bueno suceda, algo que le dé un giro brusco, un empujón, un bandazo
Nunca lo he visto antes, pero conozco a ese hombre. (Si me acercase, distinguiría en sus ojos
Gente exhausta, con la vista clavada en el suelo,
Enamorarse es fácil. Uno puede enamorarse —sin demasiado esfuerzo— varias veces al día, a nada
Tienes veinte años, tienes a la vida por el cuello a tu merced; pero no es suficiente,
Con los días contados, chaval, así vivimos todos. Esperando a que nos tachen de la lista. Distrayendo
Dejo el periódico sobre la barra. Enciendo un cigarrillo. Tomo
Es inútil buscarlo. Cuando menos lo esperas, aparece en un bar. Y ya nada es igual en adelante. Un día tocas los dientes de la gloria,
Lentos por las aceras, inmóviles en las repisas, aovillados
Como el viento que encuentra una rendija y se cuela en la habitación y lo desordena todo libros
Llora cuanto quieras sobre mi hombro, desahógate, cuenta conmigo para lo que haga falta.
Alegra esa cara, hombre —dicen, dándote una palmadita en la espalda–, hay que ser más