#Españoles
Mi mujer y mi hija, estas paredes y estos libros, un puñado de amigos que me quieren —y a los que quiero de verdad—,
Lentos por las aceras, inmóviles en las repisas, aovillados
Un simple comentario a destiempo, sin ninguna intención.
Vencido, una vez más. Por el amor… el odio, o por la vida que no hace concesiones ni da treguas. Aquí, en la esquina de un siglo
Te veía llegar, cruzar la puerta, darme un besazo en el morro, mirarme a los ojos
Esta noche, por lo que a mí respecta bien podría saltar el mundo en mil pedazos. Por qué no. Y nosotros con él. Acabar. Echarle de una vez
Enamorarse es fácil. Uno puede enamorarse —sin demasiado esfuerzo— varias veces al día, a nada
La radio está encendida. Suena la pedorreta de una moto
Ya poseemos casi todo lo que nos iba a hacer felices. Puede decirse
De aquí a un tiempo, puede que llegue a ser como vivir
Dejo el periódico sobre la barra. Enciendo un cigarrillo. Tomo
Un paquete de tabaco, un libro de poemas, cuarenta duros para tomar unas cervezas... Poca cosa, es verdad:
Están cogidos de la mano en silencio, bajo los soportales. El niño mira su columpio, muy triste,
Es lo que tiene, el amor: empiezas siendo el galán protagonista
Después de haber visto el mundo, a través de una botella, durante más de quince años, ahora –pasada ya la cumbre de la r…