Querido, “hubos” hubo muchos pero no fueron tuyos. Pero “ahoras” sólo hay uno y te pertenece.
Hazlo aunque llueva, porque llueva o no llueva, no se hace solo.
Quien no tiene memoria necesita cicatrices. Quien no tiene historia necesita tatuajes.
Las tiendas cierran, las cabezas pesan: hace frío para nada.
Tu resultado, no el precio que has pagado, es lo que envidian.
Voy a lanzarme a ver si existo: sin perdón, sin excusas, sin permiso.
Antes de empezar, vigila tus deseos: hay que ser digno.
Curioso caso: el que vivió sin ganas las acabó encontrando. La historia acabó: Quien vivió sin ganas,
No te dejes engañar: las sonrisas de verdad pueden atravesar hasta las mascarillas más opacas.
La débil dedicatoria que le dedico… para hacerlos míos se está desdibujando entre ojeras desgastadas y lírica… y se está volviendo ilegible
Viaja ligero si quieres llegar lejos: la felicidad.
La nueva normalidad solo dejará de ser nueva cuando vuelva a ser normal.
A lo mejor es bueno crearse una rutina de romper la rutina diaria y marearse en la noria. A lo mejor tenemos que ser fuertes
Las aceras siguen siendo ilegibles libros de pies cuyas páginas se revuelven al son del insomnio
Uno mendiga, muchos mirando el móvil: falta compasión.