Antonia Manuela Ramirez
Tu madre
habia nacido libre
en una isla
creada por un volcan.
Islas Afortunadas, hoy las llaman
—escarnio de tu hidalguia
dirias tu—
de aquellas tierras
que fueron traicion para ti
y hoy, varios siglos mas tarde,
son llaga de amor en mi memoria.?Donde comienza
el ser que creemos propio??En un beso primero
gozo
de union de amores
o de deseo incontrolable??Empieza con el sueNo
callado
de ser madre??O estuvo ya en el corazon
de quien soNo
con seguir existiendo
alla en sus nietos?
Bisabuela
de la tatarabuela
de una de mis abuelas
el nombre de tu madre
quedo susurado
entre las frondas
de aquella isla
creada por un volcan.
En cambio,
a traves de los siglos
ha llegado hasta mi
Antonia Manuela Ramirez,
tu nombre,
que murmuro
con respeto y carino
sabiendo que soy
y muchos hemos sido,
porque tu fuiste.
Diego Antonio Ramirez,
el sevillano que te engendro
—no me atrevo a llamarlo tu padre—
te vendio a un cura
que queria tener mujer
y te compro como esclava.
Necesito imaginar
que tuviste momentos de alegria
cuando tu regazo fue cuna
y a la vez no consigo ignorar
tu ansiedad
por lo que les deparara
su destino de mujer
a tus tres hijas.
El cura, Juan de Troya,
canonigo
no tuvo la discrecion
de su padre,
Diego de Muros,
obispo,
y quiso presumir de su familia
con las bodas fastuosas
de tus hijas.
La asi llamada “santa”
Inquisicion
considero necesario
un proceso
que sirviera de ejemplo.
El canonigo
recibio multa
y reprension
pero
aunque fue el
quien rompio su promesa
de celibato
fuiste tu
quien recibio el castigo
llevada sobre un asno
por las calles
hasta la prision
donde desaparecio
la poca libertad que conociste.
De tu nieta
Ursula de Troya
recibio tu sangre tu biznieto
Silvestre de Balboa.
En el proceso de contar
el secuestro de un obispo
a manos de piratas
cantaria
la belleza de otra isla
la isla antillana
de esta nieta lejana
que heredo de el
amor a la tierra y la palabra
y de ti, la voluntad
de seguir cultivando
a pesar de la maldad
del hombre
y de sus carceles
—carceles de barrotes
y de pensamientos—
el espiritu
rebeldemente libre
de justicia y amor.
28 de noviembre de 2021
Investigaciones genealogicas me han proporcionado el nombre de numerosos antepasados. De algunos de ellos he podido llegar a saber la histornia, como la de Antonia Manuela Ramirez, nacida en 1465, en Teror, Las Palma, Gran Canaria. Hija de una mujer indigena y del sevillano Diego Antonio Ramirez. Fue bisabuela de Silvestre de Balboa Troya y Quesada [Las Palmas, Gran Canaria 1563-Puerto Principe, Cuba, 1614] de quien muchas generaciones despues, desciendo.
