#amor #romance
Dios infinito te ama, no le importan tus males y pecados… solamente tu calma, que arda en ti su llama y así, manso se torne el asno.
1. Felicidad, un estado, estar quizá satisfecho, lograr el contento, terminar lo iniciado, o encontrarse amado,
El secreto de la vida está en el simple amor, el cuidado del cuerpo, guardando el corazón. También está en la lectura,
Cuando aceptes Su Voluntad, no la tuya y menos mía, ni la de papá o mamá; algo en ti cambiará, y aquel firme malestar,
A qué me mandas a mirar señor mío, a donde quieres que tu ciervo vaya… revélate, obediente en ti confío, remueve esta cegante muralla. Guíame a través de este mar sombrí…
Bonita en ti siempre pienso… ojos tan bellos y dulces, no sabes ¡cómo los sueño! inigualable numen: temiendo no verte, pierdo;
1. La ironía del fuego, pesar de aquella sufrida niñez, consumida en el ego, hecatombe e idiotez, antítesis de libre sencillez.
Hoy te quiero verdaderamente, sin ataduras y egos, me he librado del apego, de aquella premura en quererte. El cuerpo caprichoso engañaba,
Miro cuantas prisas cargo, con tanto despertar y aún más por comenzar, aquí ando deambulando, verdadero amor buscando,
¿Por qué hombre o mujer, te aferras al desdén? ¿Por qué amas desventura, negando a tierna fortuna? Ya terminaste a Gomorra,
Bendiciones padre eterno, y en unidad con tu espíritu muramos por ti a nosotros; apaguemos la luz tenue de la ignorancia absurda,
Aun con mil y un demonios, si mis manos no tomas, cuando lo peor se asoma, veo yo gran oprobio. Respeto tu postura,
Perdona padre a tu pecador, apiádate de su alma en muerte, para que en tu gracia puede verte y viva eterno en tu esplendor. Sin ti solo es un pecador,
No eres una princesa cualquiera, en la cima de una torre encerrada, esperando en suspiros, ser salvada… porque tú te rescatas cuando quier… En cambio, una numen valiente y ti…
Quédate un poco quieto, con ímpetu y parsimonia, escucharas al viento, pero pon mucha atención, que es un ilustre maestro,