Poesía japonesa
Ahora me doy cuenta de que tengo consejos para todos, menos para mí. Quiero ser fuerte me gustaría intentarlo
No supe retenerte en mi pequeño mundo tú querías fotografías, yo, quería amor del bueno. Ahora sé que debí
Paso las horas mirando el teléfono... sé que no llamarás, siempre hay una excusa nueva, ya no recuerdas que tú existes porqué yo te doy vida
Era una tarde de noviembre paseando por el Albaicín lo vi por última vez, me miró con sorpresa cerveza en la mano.
Noto tu aliento en la nuca, bajas por mi cuello siento el latir de mis arterias, tengo el deseo en mis labios y mis piernas temblando.
Quiero verte esta noche, en la que en el viento me susurra tu nombre. La luna de sangre, hace que necesite tenerte esta noc…
Un río de calor líquido bajaba ent… él exploraba cada centímetro de su… en las sábanas albas dos cuerpos s… se entrelazaban. Devorándose a besos los amantes
Que sola está la noche hoy, es como si el mundo hubiese desaparecido. Camino lentamente, los tacones resuenan
Te he repetido hasta quedarme sin voz que soy tuya, tuya por siempre. Créeme cuando te digo que nunca he amado
Sobre mi boca dibujando una lágrima, en la tez nívea aflora del olvido; sonando al alba
La felicidad será estar contigo. No sé cuándo. Será en el momento ideal... y será
Hoy he llorado hasta partírseme el… he dejado que el agua salada bese mis mejillas, bese mi boca. Me he dejado llevar
Hoy, no sé porqué la tristeza está mordiendo mi carne blanca, la muerde, la mastica y la escupe como
Entre caminos la soledad pasea, me busca a mí. Me escondo en los rosales, quiero la vida
Tengo que conseguir salir de aquí, te besaré te amaré hasta morir encima de ti. Pero debo de continuar