Poesía japonesa
Te busco por las calles, llenas de gente, en la orilla del mar donde no hay consuelo, en las olas que rozan
Adrenalina pura me sube por todo el cuerpo con este riesgo de hacer el amor en cualquier lugar que pillamos.
Entre mis piernas cae la lluvia calándome siento mi sangre palpitar, gotas de agua resbalan por mi boca.
Le caía encima una melancolía dulce, como una caricia leve, que le oprimía el corazón a veces.
Cuando vuelvas ya no estaré me habré ido a algún lugar traspasando la frontera de la soledad.
Dicen del Müki que es un Haiku expulsando la rigidez de 17 sílabas e inició “la forma libre Haiku”. (Rechazando el uso de los kigos, aunque puede tener kireji en el tercer verso como el...
Me susurraste mil palabras al oído… leyendas urbanas que nunca creí, tú crees que me tienes en tu mano y no ves que nunca fue así. Se dice por ahí que vas presumiend…
Que te siento en el hueco de mi clavícula y muero. Que mi mano hace una constelación con tu ombligo de centro.
Sentada en la cama en mi cuerpo la brisa otoñal hace que se erice; y que empiece a rememorar. Recuerdos de tabernas
Con la luna ardiendo al ver a los amantes el mar se calentó al ritmo de la marea lunar. Allí bajo su luz te besé
Luna de sangre envuelve mi alma en ti sé mi amante nocturna. Soy tu astro oscuro besa con tu fulgor
Tal vez no es que no recuerde el c… sino que prefiero olvidarme. Solo esperar que pase este pervers… Mi casa ya está en ruinas, se derr… el fuego trepó hasta la terraza do…
Sobre mi boca dibujando una lágrima, en la tez nívea aflora del olvido; sonando al alba
Átame, hazme tuya, pellízcame y llévame al infierno del placer, pasea tus manos por toda mi piel.
Conmigo, no te equivoques, no creas que me tienes en la palma de la mano. Que tu mano no me sirve ni para acariciar mi boca