#Mujeres #Nicaragüenses #SigloXX #SigloXXI
No preciso conceptos. No más divagaciones ni teólogos discursos que anestesien mi herida. Tus palabras preciso,
Qué lástima que duermas y se interrumpa el diálogo y no sientas mi beso en tus ojos cerrados. Qué lástima tu infancia
Yo, poeta de oficio, condenada tantas veces a ser cuervo jamás me cambiaría
Sólo éste ahora es mío este momento el pasado escapó y no vislumbro el rostro del futuro.
Una mirada a veces un gesto entorpecido una frase un olor el beso que al unirnos
No puede conmigo la tristeza la arrastro hacia la vida y se evapora.
Fue una pequeña muerte tu partida. Una muerte pequeña que me crece cuando imagino a veces que estás cerca
Por las noches en sueños más de un amigo muerto resucita, al despertar
También me gusta el amor al que le cierran la puerta el que entra por la ventana volando sobre una cuerda.
Fui la nube y la lluvia y el mar y quiero ser la tarde y la muralla
Otro círculo amor que hemos cumplido ¿será este el último en cerrarse?
Quiero ser todo en el amor el amante la amada el vértigo la brisa
Muero de a poco, amor no es la muerte sorpresa que deseaba la que libera y lanza
Todos lo que amo están en ti y tú en todo lo que amo.
No sé si con tu muerte has quedado a la zaga ¿eres recuerdo? o has dado un salto repentino