#Mujeres #Nicaragüenses #SigloXX #SigloXXI
Tu muerte te congela estás inmóvil mi vida en cambio fluye y me acerca veloz
Dicen que la muerte es solitaria que nos morimos solos aunque estemos rodeados de aquello… pero tú me llamaste y yo no estuve:
No sé si con tu muerte has quedado a la zaga ¿eres recuerdo? o has dado un salto repentino
Porque aprendí a quererme puedo sangrar con tus heridas.
Estás vivo en mi pecho y sólo yo te siento. Eres el alquimista que transforma en poesía nuestro llanto.
Estimado señor: Esta carta la escribo en mi cumple… Recibí su regalo. No me gusta. Siempre y siempre lo mismo. Cuando niña, impaciente lo esperab…
Dame tu mano amor, no dejes que me hunda en la tristeza. Ya mi cuerpo aprendió
Florecen los almendros en Mallorca y no estás para verlos. De mi balcón anoche los vi fosforecer.
Qué lástima que duermas y se interrumpa el diálogo y no sientas mi beso en tus ojos cerrados. Qué lástima tu infancia
No preciso conceptos. No más divagaciones ni teólogos discursos que anestesien mi herida. Tus palabras preciso,
Cada vez que te amo vida y muerte están presentes: amanecer y noche
Nunca más esta lluvia ni esa mancha de luz en el peñasco ni el borde de esa nube
Es extraño este huésped este amor cuanto más me despoja más me colma.
Fue una pequeña muerte tu partida. Una muerte pequeña que me crece cuando imagino a veces que estás cerca
Hoy es noche de sombras de recuerdos-espada la soledad me tumba. Nadie que aguarde mi llegada con un beso