The Lady of Shalott, by Walter Crane
Don Zopilote

Pobre Sofia

Los cobardes le tienen miedo a la felicidad.
“Vive por mí” es de olvidar cuando hay raíces marchitas.
Oh, Sofía, tu amabilidad me ha dotado del amor
y la compasión recién conocida.
Yo, como criminal, te robaré la soledad, porque otros
te hurtaron la compañía.
 
Vive por mí el otoño que es primavera
con cincuenta suicidas en papel transparente.
¿Amor es lo que necesito? Que sea el tranvía
quien lo cargue hasta mi corazón en tu regazo.
 
Oh, dulce Sofía, no te vendas a la pobreza,
porque esta no te ha necesitado por la avenida,
sino que te espera de frente a la noche húmeda
en esquina con mi maleza.
 
Juegas conmigo; tengo celos de que seas humano
y, sobre todo, que lo merezcas.
Júrame, amarga Sofía, que somos iguales ante la muerte
y, sobre todo, diferentes antes de la vida.
Mi amada Sofía, paga por última ronda y sostén mi mano
para dirigirnos a la puerta de umbral sin forma.
 
No fui capaz de robarte la soledad; no tuviste ni eso para dar.
Oh, mi pobre, vivir por mí es tu maldición; la inmortalidad
es lo que te perseguirá, cobarde bufón.
Vivir por alguien, de eso huye hasta el más deleznable.

Otras obras de Don Zopilote...



Arriba