#Nicaragüenses #SigloXX #SigloXXI #Epigramas (1961)
Viniste a visitarme en sueños pero el vacío que dejaste cuando te fuiste
Otros podrán ganar mucho dinero Pero yo he sacrificado ese dinero para escribir
Aquí pasaba a pie por estas calles, sin empleo ni puesto Y sin un peso Sólo poetas, putas
Te mataron y no nos dijieron donde enterraron su cuerpo, Pero desde entonces todo el territorio
De pronto suena en la noche una sirena de alarma, larga, larga, El aullido lúgubre
¡Mi pelo largo! ¡Mi pelo largo! Querías tu muchacha con el pelo largo
Al perderte yo a ti, tú y yo hemos perdido: yo, porque tú eras lo que yo más amaba, y tú, porque yo era
Las pesadas gotas parecen subiendo la grada y el viento golpeando
Nuestro amor nació en mayo con malinches en flor —Cuando están en flor los malinches en Managua—.
Uno se despierta con cañonazos En la mañana lleno de aviones Pareciera que fuera la revolución
De estos cines Claudia, de estas fiestas, de estas carreras de caballos, no quedará nada
“No tengo otro” le he dicho y repetido muchas veces. Y oí que decía dentro de mí no con palabras confusamente pero precisas, decía dentro de mí
Me contaron que estabas enamorada de otro Y entonces me fui a mi cuarto Y escribí ese
En la hamaca sentí que me decías no te escogí porque fueras santo o con madera de futuro santo santos he tenido demasiados te escogí para variar.
Todas las tardes paseaba con su madre por la Landetrasse Y en la esquina de la Schmiedtor todas las tardes