¿Qué fue de ese poema que no pude atrapar el que pasó rengueando frente a mí con las alitas rotas?

Estimado señor: Esta carta la escribo en mi cumple… Recibí su regalo. No me gusta. Siempre y siempre lo mismo. Cuando niña, impaciente lo esperab…

Quiero entrar a la muerte con los ojos abiertos abiertos los oídos sin máscaras sin miedo

Fue una pequeña muerte tu partida. Una muerte pequeña que me crece cuando imagino a veces que estás cerca

Ven conmigo subamos al volcán para llegar al cráter hay que romper la niebla allí adentro

Ese beso de ayer me abrió la puerta y todos los recuerdos que yo creí fantasmas, se levantaron tercos

No preciso conceptos. No más divagaciones ni teólogos discursos que anestesien mi herida. Tus palabras preciso,

Fui la nube y la lluvia y el mar y quiero ser la tarde y la muralla

No te pierdas, Teseo vuelve a mí. La playa está desierta tengo los pies sangrientos de correr en tu busca

Mi laberinto es circular voy cavando en el aire con los ojos clavados en la muerte que me bebe

Hoy es noche de sombras de recuerdos-espada la soledad me tumba. Nadie que aguarde mi llegada con un beso

Es simple nuestro amor sin estallidos como una de esas casas con helechos y alguna que otra rana

No pienses en mañana ni me hagas promesas ni tú serás el mismo ni yo estaré presente. Vivamos juntos la cima de este amo…

Cada vez que te amo vida y muerte están presentes: amanecer y noche

Digo amor y lacera mi cuerpo el desamparo.