Grácil volar de leves ruiseñores, núbil campaña de cristal tallado; el ensueño del sueño de mi Amado es el prístino amor de mis amores.… Rosal de amor que da sus rojas flo…

Mar, mar mío, que cabes en la orillita de un sueño.... Mariposa de la noche vestida de azul de cielo:

(La luna, anillo blanco del aire, se ha sumergido en el mar...) —Anillo de blanca luna, ¿por qué senderitos vas...?

¡Que yo te cante, Amor, con júbilo! Júbilo de tus pétalos anudados al llanto y a la risa, de tus nubes sin grises,

¡Oh rosa, plenitud de muerte y vid… Esencia, luz y ser, belleza. ¿Tan… adoró tu deidad el sol y el llanto para engarzar tu imagen definida? Rosa del goce sin dolor, nacida

Por sentirme despierta en la cauti… morada oscura de su sangre, llevo este amargo laurel de gajo nuevo y esta miel de cilicio rediviva. Y no quiero saberme fugitiva

Siente mi corazón una alegría extraña, a flor de piel?vaso de es… aunque yo desnudase su presencia su desnudo integral me cegaría. Es esta milagrosa sinfonía

La aurora se contempla en su regaz… su falda rosa la despliega el río. Hay un cañaveral en desvarío que luce verde y piruetero lazo. La estrella de azahar cuelga su br…

He dejado mis palabras entre la flor del almendro y he dormido mis caricias azules en tu recuerdo. Se ha recogido en mi mano

Por el verde azul del mar el armiño de la ola. Por el verde azul del mar. La leve cinta de espuma hace un adiós espiral

He dejado mis palabras entre la flor del almendro y he dormido mis caricias azules en tu recuerdo. Se ha recogido en mi mano

Hijo de la luna he sido, mares de plata mares de insomnio en la media noche y pálido. He buscado en los sombríos ríos,

¡Abril, Abril!...¡Tu sol, tu bris… tus níveos azahares y tu cielo! ¡La linda línea leve de tu velo de desposada, juvenil criatura! En un mar de violetas, tu figura

Plenitud de tu nombre, mar. Tu ri… ir y venir, llegar, saltar la cima de tu propio elemento: deshojar con tu fuerza la flor de… de tu risa de fósforo:

Traía el alba enredada en sus ojos la vigilia. ¡Qué violeta en sus ojeras, qué marfil en sus mejillas...! Desnudó sus blancos hombros