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Ilusiones rotas

En invierno los corazones se endurecen como piedras, hasta que llega el invierno y con su calidez derrite el frio en ellos.

Un mar de sentimientos, siempre invaden a mi mente las cosas que pudieron ser y no fueron, las palabras que pude haber dicho y calle, como sería de diferente mi vida si no hubiera tomado ciertas decisiones que si tome.

Quiero dar rienda suelta mis dedos para que puedan expresar las mil ideas que tengo en mi mente y en mi corazón, sin embargo no son tn rapidos ni capaces de expresar todas las cosas que se siento adentro, siempre me han dicho que yo soy como una cebolla, si, una cebolla. Se debe aprender a sacar capa a capa.

Se que soy gentil, me considero común y noble, me puedo adaptar a ciertas cosas pero hay otras que no, a estas alturas valoro más la paz y la tranquilidad, que cualquier otra cosa, esa paz que si, a veces me aburre y me lleva en un mundo de monotonía, pero con estabilidad emocional, a veces peco y me atrevo a experimentar adrenalina, sin embargo, la paz, para mi es lo más importante.

Si algo no me genera paz, sino más bien inquietud, me alejo, puedo querer mucho, pero me alejo, porque lo que menos quiero son complicaciones, estoy en una edad que no quiero estar mortificada por algo que quizas ni valla a funcionar, pero mi mente maquina y maquina y vuelve a maquinar y me da mil ideas, de las cuales algunas me generan tristezas y otras con las que fantaseo me dan alegría.

A veces cuando me hago un analisis y me observo de manera retrospectiva, que mis emociones parecen una montaña rusa, a veces me siento muy feliz y otros dias tristes.
Me siento sola, como si ningún lugar fuera mi hogar, sin una familia, sin unos brazos donde poder sentir cobijo, sin un amante que despierte esa llama en mi, sin esa musica que me pueda gustar, no tengo un ideal, algo favorito, a veces me siento gris, como si no quisiera despertar.

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