¡No te he llorado, no! En vez de… es rocío de sangre roja y espesa que en ofrenda traig… sobre la tierra madre. He puesto aquí, sobre tu hierba ve…

Hollando rocas se elevó a la cumbr… de la riscosa sierra gentil macho cabrío, y allí, sobre la inmensa pesadumbr… que apisona-a la tierra,

Cada vez que tu nombre pronuncio,… viviendo deshecho, me parece que el cielo la boca me… renace mi pecho; En mi alma, Teresa, tu nombre es…

¡Ave, María! El sol se. acuesta e… centered¡Ave, María! El verdor de su hierba está ya en… centered¡Ave, María! Por jní y por ella, ¡por nosotros,…

Alto soto de torres que al ponerse tras las encinas que el celaje esm… dora a los rayos de su lumbre el p… Sol de Castilla; bosque de piedras que arrancó la h…

Me abraza con sus alas, cual gigan… para hundirme en la tierras—negro,… y ai quitarme el aliento me envuel… en que me prende a vida, cual post… del recuerdo bendito de tu postrer…

Noche blanca en que el agua crista… duerme queda en su lecho de laguna sobre la cual redonda llena luna que ejército de estrellas encamina vela, y se espeja una redonda enci…

Tú me levantas, tierra de Castill… en la rugosa palma de tu mano, al cielo que te enciende y te refr… al cielo, tu amo, Tierra nervuda, enjuta, despejada,

Me voy de aquí, no quiero más oírm… de mi voz toda voz suéname a eco, ya falta así de confesor, si peco se me escapa el poder arrepentirme… No hallo fuera de mí en que me afi…

¡Aquella tu honda inspiración enfe… Alzábase tu pecho —tal una ola—por amor del aire, y era entonces tu huelgo sollozo silencioso y recojido;

«Cuando me enseñaban—me decías— la tabla de multiplicar, era el siete lo difícil, ¿sabes? el siete no sé cantar... Siete por tres, por ejemplo, dime,

¡Oh en aquellos ratos cálidos, a punto de desmayar, casi cadáveres... pálidos... calina sobre la mar... los corazones inválidos!

«Los amantes de Teruel, tonta ella y tonto él.» Es lo que dicen los tontos cuando han perdido la fe en su tontería misma,

Al cautivarnos el Amor ¿sabía la suerte de su empresa? ¿O fué la Muerte la que unió prim… con sus manos las nuestras? Al vernos por primera v e z ...—¿n…

Es á la sombra del silencio santo bajo el silencio de la sombra augu… lánguidamente va volando el canto de una campana sobre la robusta rocosa serranía á la que el llanto