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Desajustes métricos

La fibra de lana
Estirándose
Amenaza con desprenderse
Elongándose hacia el límite de lo inexistente
 
La cuestión del debate
Será si puede armarse
El poema así como un reloj
 
Me argumento: de la integridad del verso depende la sutileza de su movimiento.
En la vigilia, el  lienzo
Parece abalanzarse contra el panel blanco de las ideas y plasmarse
Informe, sonido de fondo
Bocina intermitente, molesta
Allí a lo lejos en alguna fiesta
 
De lo real un retazo, el verso
Rastro de lo impermanente
Impulso primitivo de trascendencia
 
El poema es cíclico
La naturaleza se achica en un gesto:
En el mecer del calor y el viento
Escribiré solo la ventanilla abierta y tu pelo
 
Ya no pienso en tocar el viento, pero sí el reloj
Hacer palpable mi poema genuino y desgajarlo
Y completamente mío, mío mío como mis ojos
Que se lea y se escupa y se mastique y regurjite
Únicamente con mi voz
 
Todo fruto de un extenso trabajo precisa de un soporte, aunque sea mínimo y prestado: un papel,
un cuaderno
o una servilleta
En las manos de un extraño
 
El poema es un espacio donde nada debería ir, una inoportuna lesión en el doblez blanco
Una impresión de las pérdidas, melancólica
Inevitablemente, naturalización del vacío
Y la constitutiva insuficiencia:
La distancia irremediable
Querer penetrar en el núcleo de las cosas con la palabra
 
Vacía
La palabra hueca que resuena
Intocable manifestación de lo que no es
Una ceniza que desaparece
Con la potencia de un suspiro
 
El poema
No es
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