Manuel Altolaguirre

Beso

¡Qué sola estabas por dentro!
 
Cuando me asomé a tus labios
un rojo túnel de sangre,
oscuro y triste, se hundía
hasta el final de tu alma.
 
Cuando penetró mi beso,
su calor y su luz daban
temblores y sobresaltos
a tu carne sorprendida.
 
Desde entonces los caminos
que conducen a tu alma
no quieres que estén desiertos.
 
¡Cuántas flechas, peces, pájaros,
cuántas caricias y besos!

#Españoles #Generación27 #SigloXX (1931) Soledades juntas

Vous avez aimé cette lecture ? Offrez-nous un café !.
Votre aide nous permet d'exister.
Préféré par...
Autres oeuvres par Manuel Altolaguirre...



Haut