A veces pienso en él tan absurdo como triste
Non so nulla di te non ne ho bisogno, ti conosco nel silenzio, nelle parole che mai ci siamo detti.
Potremo inventare tramonti, paesaggi e momenti, sensazioni in questa solitudine infinita, immagini furtive,
Te deseo lo que no se debe desear lo que no se puede desear lo que deseo
Los muros que esculpieron los despiadados hijos de la ira se yerguen majestuosos sobre los imbricados berrocales lejos de allí
Cuando’l sol s’alcancía por la lom… ya ta to er mundo en la viña. Los cestos, los corchos, las navaj… y la gente con la risa pronta, pero los riñones ya tiritando.
No hubo palabra que quebrara la qu… ni gesto que torciera el cauce del… Solo la certeza de un puente invis… de un hilo de aire que sigue tendi… Agradezco el arte de no decir,
Ajeno a los espacios donde habito esperando impaciente tu encuentro ajeno a las mentiras de la vida esperando tu sonrisa, tu mirada ajeno a mi mismo y a tu ausencia
Tardes de otoño surgen en mi memoria como fantasmas
Che destino crudele, lo spazio e il tempo che ci separano.
Il tempo si dissolve in un soffio fugace, i tuoi occhi, il tuo sguardo seren… le tue parole, che mi fanno tremare,
Ayer altivo dominando sus campos hoy olvidado
Tíu Melchor, con su gorra escurrí… vivía onde’l aire peinaba la umbrí… con gatos, con trapos, con yerbas… decía que la ciencia la traían los… Sabía de verrugas, sabía del mal d…
el sol de mayo renacen ilusiones trinos y flores miras al cielo abril es primavera
La Rufina nació en enero, con los sabañones picañu’l cuerpu y un gritu que ya sonaba a desgracia antigua. Su madre murió del sustu