(2008)
#Mexicanos De El me pertenece poco un viento
Lo que antes era fino concierto, hoy es una sinfonía: cobre de los intrumentos en las cuerdas de oro del día. La marcha heroica de la tarde
Una vez me enamoré de una trotskis… Me gustaba estar con ella porque me hablaba de Marx, de Engels, de Lenin, y, desde luego, de León Davidovic…
Todo lo introducía bajo la almohad… Su temor. Las miradas ambiguas de Doña Marg… El juego de palabras con el que se regodeaban
Después de descifrar el himensaje que puvislumbra el ojo cuando espí… la intihumedad caliente de tu estr… me sé medicorrecto en blanco traje… Receto pomamadas y masaje,
Sueño con poseerte, aunque tu espo… engañado y furioso, diera muerte a mi audaz e impetuoso afán de ver… sin defensas e inerte ante mi acos… Qué sueño de quererte tan riesgoso…
Bajo la noche, de la nave han salido las mismas preguntas: —¿Acaso sabemos hacia dónde vamos? —¿Nos habremos equivocado de ruta? Hace tiempo que dejamos la tierra,
En medio del silencio, el de repen… del grillo. Y en las aguas, el anz… en que pican los ojos y el anhelo de hallarse en alto lago barcament… Hay en Chapultepec (en un ambient…
En el jardín, las flores no compiten unas con ot… El jardinero no se anda organizand… concursos de belleza. La rosa no luce una vitrina plagad…
Con mi canosa barba llevo puesta la edad precisa de las confusiones de este coleccionista de rincones, señor de las preguntas sin respues… Sinfonía de lágrimas y orquesta,
Soy un poeta que habla de pájaros. También claro de otras cosas la luna los hipogrifos violentos
Aquí salta el oleaje, con la suma de infinito y espuma y abordaje. Hay conchas, algas, bruma. Y el l… que en la brisa salvaje halla mi p… Aquí, con el coraje que trashuma,
Fue un amor repentino o, si se prefiere, a primer poema. Al advertir en el renglón de sus l… la insinuación de mi primer intent… aventuras con la poesía,
Si a un hombre le extraemos la saliva, que es el caldo de cult… de palabras y silencios; el semen preñado de futuro que pretende enmendarle la plana
Tras de saberlo, apuro los venenos de la imaginación, que me proyecta un diálogo de manos y de senos, mientras acá una herida se me infe… Cuando siembras de cielo los ajeno…
Mi lengua en tu pezón buscando endurecerlo para ablandar así tus reticencias. Mis manos correteando tu blancura.