POESÍA JAPONESA
Nunca había oído tanto silencio, mi carne blanca como nácar reluce hambrienta del sonido de una mano recorriéndola. No veo la oscura noche,
En el Sacromonte bailando, está la gitana morena, ¡Mirándola! La luna llena; volantes revoloteando. A ella le dan una azucena,
Magia Que tu dedos llenen mi cuerpo de magia. Que tu voz cristalina, me susurre al oído que siempre me amarás.
MI piel está bailando con tu voz en la penumbra son de tu corazón ritmo de tu alma
Lágrimas de hielo resbalan lentamente, por los amores perdidos por esos poemas inacabados. Un cielo negro
Se van los años tejiendo sus días han dejado retazos de recuerdos en esta alma mía.
center Pechos granados de la ninfa del agua: deleite fauno
Charla en la barra hombre medita, en mesacenter reloj atrasa
El jardín níveo pétalos de jazmín blanquean su pelo trenzas de flores albas ciñen su bella cara.
Dame un beso que necesito subir al… déjame acercarme que no me como a… dame ese beso que quizás me envié… y allí me quedaré muriendo. Venga, sabes que estás deseando
La dulzura de sentirte en MI ser, oigo tu corazón, con él me besas, me abrigas el alma, entre aguas coges vida,
El amor no se mide por cuantas veces te dice te amo, se mide en los destellos dorados de tu mirada. Y da igual que seamos tan diferent…
Yo protegeré tu corazón, haré que brilles como un diamante, te amo tanto, mira en mi interior, verás que rebosa mi corazón de amor por ti. Mira mi cuerpo que se estremece como brisa mec...
Corre el riachuelo con esa libertad que da la vida. Cantaba el pájaro canciones de pasión,
Hago un alto en el paseo que estoy dando por Granada, me siento bajo un naranjo, el aroma me asalta. Rodeada de edificios antiguos llenos de historia cierro los ojos. Imagino todo, pare...