Debiese el existir Un gravamen sobre las pollas Que te pretendas implantar O aquellos coños que en tu Sectario cuerpo

Bostwana se cae del Mundial, algo… pasando dentro de mi cabeza, algo… entiendo, algo de paja, de miedo,… de los treinta y tres septiembres… en el mundo, no sé, me sobecojo, e…

Es una sensación extraña, un temor diurno a la quietud de la calma, a los ruidos ordinarios, los perros que ladran,

Maldito y gigantesco proceso el devenir de la cualidad cuando por ella nos atamos al mastil de la nave más veloz. No hay en nosotros mas que migajas

Cuando Te visten De desprecios Que no te pertenecen Cuando te eligen

Quiero beber la eterna primavera de la fuente de su boca encendida, manantial rosa, de espuma vertida en el mar de mi soñada quimera. Vi naranjos en flor, por vez prime…

Contraste, y un árbol que rasea el… apretando las vidas de unos pocos… ramas de peripecia sostenida, humo… que se mantienen en la lejanía aun… en alguna ocasión llegan a cerquea…

Las horas lentas del desvelo, café y tabaco para ahuyentar los minutos. Contrarremedios. Dolor de cabeza y yo sin paracetam… Decido escribir este poema

No tengo, ese hueso, que provoca tanta felicidad, llamado a gritar hacia dentro, a veces me carcomo, el aliento, el soplo, el huracán donde voy no lo encuentro y no tengo una puerta que...

Como un joven tigre, inexperto y o… me aventuro en una selva perdida donde abunda, por doquier la comid… será mi plato el infeliz venado. Tranquilo mata, el felino rayado

En un rumor de espejo clandestino luce la ortiga y una noche de acer… rasga mis venas y el frescor de en… me amortaja con su aliento anodino… Por el blanco norte de amor y espi…

La soga al cuello El ahorcado De nada sirve Nada a nado Todo es cierto

En un momento dado hay un hombre que está detrás de una puerta, la atraviesa y se sienta en un banco situado a la derecha de la misma, cruza las piernas y con los ojos intenta alcanzar ...

En esta vida que me han elegido En esta vida que me dejan vivir No existe el azar No existe la casualidad. En esta vida de terrorífica soleda…