Abatimiento Empírico
Aquel pensamiento carcinógeno asesinaba su existencia.
Su dolor era inmenso
y lacerante; mutilaba cada instante su alma
mas no conocía el orígen de aquello que apaciguaba su alma
que de por sí ya era lo suficientemente tácita.
Intentaba descifrar aquella jerga química de su arilugio cerebral.
Mas no lograba hallar, respuesta; de aquello que anhelaba apartar.
Pero entre literaturas encontró el consuelo(por una fracción de segundo)
en aquella veinteañera vivamente inanimada
aquella felicidad sintética que sentí empatía por ella...
o quizás de forma invertida.
Aquellos somníferos cuales añoraba melancólicamente
brindabanle cierta relajación corporal.
El sólo pensarlo... le erizaba la piel;pero más aún,
aquella mirada fractal de su propio reflejo.
Preferido o celebrado por...
