Cargando...

Invierno

Crezco en la humedad de la carne
Esperando que termine el invierno dentro de corazones tibios
Hijo del veneno otoñal del agua
Sin otro merito más que ocupar tu espacio
Y sin otro logro más que contar nuestro tiempo
Siendo muñeca del viento
Y váctima de las sonrisas
Esperando un futuro
Un futuro en el vacío
Donde nadie me escuche
Donde nadie me mire
Donde nadie me hable
Donde me consuma más rápido la nada
Y llorar
Sobre el frío cascarón
Donde pueda oler de nuevo la piel
Y añorar la voz del demonio a medida que me acerco a la felicidad
Y envidiarte
Para creer que tu aliento es mío
Y que este este pecho frío es fruto de mi existencia
Y a medida que mis trozos de piel se balancean, sonrío con más furza que antes
Y a medida que me derramo, me vuelvo sordo, para no arrepentirme de sentir
Y a medida que me voy, trato de dejar los ojos abiertos para ser feliz con tu imagen
Para, a lo mejor, aparentar que estoy vivo
Y tal vez, salvarme del miedo de morir sin recuerdos
Porque soy una mota de polvo
Bailando en soledad mientras vuelo en el vacío
Esperando que me digas que me viste
Que valió la pena haber preguntado mi nombre
Que si tu redención fuese mi muerte, dudarias
Que si me mirases, seria para algo más que sentir dolor
Que si mi futuro fuese tuyo, te conmoverías  un momento antes de quemarlo
Para convercerme de que importé
Y para creer que muero en paz
Porque cada río oscuro entre nosotros
Cada noche en que esta vida se hace mas lejana
Y cada “hasta luego”
No son porque no te quiera
Sino, porque sé que no lo podré hacer para siempre

(2014)

Preferido o celebrado por...
Otras obras de Vicente Maturana Gálvez ...



Top