Inspirado en YUKIO MISHIMA:
En las sombras del anhelo, brilla el fuego de un suspiro, como un eco azul y bello. Se desliza en lento giro, cual un río sin sendero,
Dijiste “una falta” y fue un gran… “solo un desliz” cuando ardió el a… “Un pequeño fallo”, todo se quebró… “cosas del destino” cuando él se m… “Tan solo un rasguño” y sangró la…
El pastel de los deseos Si quieres un pastel de ensueño, con sabor de festival, busca azúcar de las nubes y harina de un bosque especial.
Domingo huele a jazmín, a pan horneado en la mesa, a flor abierta y sorpresa de incienso suave y jardín. Viste amarillo marfil,
Era tan frágil como un ave que cayó al suelo desde su nave. Tenía el ala
Llega mi tío hoy, trae un tamborón; suena rataplán, baila mi gorrión. Viene mi tía azul,
Hoy canta el día, Lucía, tu nombr… la brisa lleva en versos un eco de… la vida, en su susurro, tus años a… y el sol viste de oro la luz que e… Acosta eres en fuerza, en raíces q…
Poema: “Decálogo de Navidad” Género: Poesía clásica Tono: Melancólico, Reflexivo Amarás en diciembre con amor sin m… al que vaga en las sombras y se si…
El abuelo va despacio con su bastón de nogal; me sonríe y me saluda, tiene un gesto paternal. La abuela teje en su silla
Te vi junto a la fuente, descalza, entre la espuma, y el sol, como una pluma, jugaba en tu presente. No supe si era suerte
Lo guardamos en el pecho como un huésped que no avisa, y aprendemos a mirarlo sin que rompa la sonrisa. Lo nombramos en susurros,
Los hijos no se van, la vida los l… y aunque el alma los quiera retene… sus pasos dibujan su propia trama, sus alas nacieron para aprender. Ya no eres su faro, solo un reflej…
Cada noche, cuando enciendes la lá… y su luz resbala por tu espalda, comienza un poema en mi boca. Es el agua que aún brilla en tu cl… la sombra curva en tu cintura,
En la bruma de mi mente, tu recuerdo siempre brilla, como el eco de un río, como luna que suspira. Te busqué por mil caminos,
Nació mi verso en la olla hirviend… donde el agua canta su son sonoro, se hizo estrofa cuando, riendo, saltó la sal con gesto de oro. En la sartén del alba espumosa