Soneto de Daniel Plainview
Soneto de Daniel Plainview.
Devorado por su propia luz
el hombre, asechado, carga
contra su propia cruz
una naturaleza inherente y amarga.
Ablandado por su pureza;
íntima sensibilidad humana,
lucha contra su crudeza;
sustancia del abismo que emana.
Perdido en su ambición
y extraviado de su amor,
difunta es su redención.
Reflejado en una máscara
de oscura sangre perversa
a zarpazos tirará de su cara.