—¿Cómo se llama esto? —Mar. —¿Y para qué sirve? —Para irse.

Juegos de los fuegos artificiales… Rapapolvos amangualados de los uni… Mutismo por miedo a sucumbir indig… Indolencia del régimen con el rest… Fronteras intangibles en la estrat…

esto no sufre de poesía

Hubo un tiempo en que los hombres fueron dioses y dominaron todas las artes y las ciencias de forma misteriosa e inmisericord…

Colombia es el poema más difícil q… Trozo lagrimoso de trópico soñando… Montañas prodigiosas perdiendo la… Ríos antiguos de sangre nueva. Todos los verdes posibles.

No importa quiénes sean los comensales al otro lado del libro. La poesía no sabe dar de comer.

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Las horas sin advertir mutaron, son más prófugas y audaces. Los convidados escasean, más irónicos e hipócritas, tiñen las paredes

animal de siete cuerpos contaminad… derrotados por la pérdida de sí mi… ojalá haya guardado en un cajón fo… y todas las pruebas de sus triunfo… para cuando sus hijos crezcan

Soy un animal defectuoso: escribo y leo, pienso y actúo. Pero tengo un problema mayor: el animal preferido de dios es el…

Desde que te conocí, poesía, me hice la misma pregunta. Desde que te conozco, me he hecho la misma pregunta. Y siempre estuviste,

Para qué un poema extenso si la vida dura un verso.

Cuando borro sonrío. Dios sonríe cuando crea vacío, aunque nadie lo haya visto.