De «Disentir de las paredes en blanco»
—¿Cómo se llama esto? —Mar. —¿Y para qué sirve? —Para irse.
Las horas sin advertir mutaron, son más prófugas y audaces. Los convidados escasean, más irónicos e hipócritas, tiñen las paredes
lo bueno de que toda la industria… esté más encochinada que la de las… la farmacéutica, aunque la otra ta… es que si usted, hombre de corta e… recibe el balón y está inspirado p…
Por fin lo descubrí: el mundo es una ruleta rusa, y nosotros la bala.
les tengo una invitación muéranse los espero con la parilla encendid… y con cerveza fría
Para qué un poema extenso si la vida dura un verso.
la alfabetización no clasifica par… ni el amor propio ni el respeto pr… pero sigan y descubran libremente… las ganancias de los ricos seguirá… y las pérdidas de los pobres que c…
Quienes me ven en la calle no sabe… Aún no es hora de encerrarme.
Aunque sean molinos son gigantes,… Sé de lo que me habla siempre que…
Aguas negras de color rojo que nad… Hacinamiento ulterior a la muerte. Igualdad de partes en partes desig… Restos remojados en espera de la l… Pictogramas de la colombianidad mo…
siguen impunes como si partir
Resulto ser la bala. Irrumpo en la batalla, busco el corazón de la guerra. De camino, mato lo que soy, siembro nuevos miedos.
No me consta que soy yo el que dic… Habrá que ver qué dice la historia y qué la literatura. Y qué yo.
Desperté con la mitad de los ojos.…
señor pasajero, si su avión no se… se lo debe a santa bona de pisa aunque en los aeropuertos no se ha… y los que aterrizan regresen al at…