Somos tan pequeños que ni sabemos… Somos tan pequeños que la mayoría… desconoce nuestra existencia, nues… Y somos tan pequeños que si desapa… casi nada en el universo lo llegar…

Colombia es el poema más difícil q… Trozo lagrimoso de trópico soñando… Montañas prodigiosas perdiendo la… Ríos antiguos de sangre nueva. Todos los verdes posibles.

Desperté dentro de un gato en su ú…

Por personas como tú hay personas como tú.

ya sé que de mejores

Juegos de los fuegos artificiales… Rapapolvos amangualados de los uni… Mutismo por miedo a sucumbir indig… Indolencia del régimen con el rest… Fronteras intangibles en la estrat…

Además una cosa: El poeta está ahí Para que el árbol no crezca torcid… Nicanor Parra Los malos poetas

No importa el lado de la puerta que nos vea. El afuera siempre está adentro.

—Nos vemos allá, si te parece. —Sí, seguro, pero, ¿cómo te recono… —Soy el que va disfrazado de perso…

Me da lástima tu sangre cuando cor… sin ritmo ni prosa hacia cualquier… Me doy golpes de pecho por no pone… vieja y desportillada para que no… La otra noche tu muerte me importo…

esto no sufre de poesía

Resulto ser la bala. Irrumpo en la batalla, busco el corazón de la guerra. De camino, mato lo que soy, siembro nuevos miedos.

La enemiga defunción te invita, pero no asistas a esa fiesta. Vete pronto a tu lejana villa, roe un árbol, dale una semilla.

Desperté por mayoría de votos. Y…

Ser poeta en esta época (en esta vida, en esta era) no tiene mérito alguno (cualquiera podría, a muchos les t… ni don ni gracia