Siempre el mismo es el eco de los ecos de un solo eco más ligado al ultraje

Para aprender del filo de la ausencia pequeño surco de salobre esperanza… Y entre el horizonte y el mar la travesía.

Sobre las colinas el destierro irremediable del hombre. Solo sin viñedos

La ciudad quedó tan lejos las manos de mujer y el viento tan cerca. Cuál es la fragancia

El vino transfigurado es provisión para el camino. Entonces las manos nos ofrecen

Desecho la cadencia de las posesiones precarias. Aquel mensaje recibido en el plenilunio envejeció mis manos.

La plantan al frente de la nave tal vez parezca inmóvil pero debe hacerse cargo del timón. Sobrevienen tempestades

El cielo es de la coalición el desierto es iraquí el dolor debería ser privado pero es obsceno en las fotos de los periódicos.

Ajena siempre en el paraíso desvestida la piedra tallada en re… apenas un poco de fe y sólo deseos en voz insomnia (por la misma peste de los Buendía…