#ExpresionismoPoesíaRealismoElElEntreSituadaSucioY
Tú sí tú no tú sí tú no tú sí
Hojeando un libro de Rilke en edición bilingüe alemán/inglés que me he encontrado
Suena el teléfono. Manolo. Me com… que le han dejado un ojo como un p… En una fiesta —cosas que ocurren,… cuando uno se divierte. Algo que, como ya se sabe, no gusta dem…
Hace falta estar a punto de morirse para caer en la cuenta de que nada en esta vida
La vieja terminó por fin de volver… Se levantaba la falda y exhibía el… le pedía que se lo chupara al maitre. Se llamaba Linda. Tenía
Salgo del trabajo. Los huesos, el… dulcemente dolorido, como –a veces… después de un polvo de los buenos. La luna, sajada en dos pedazos, me… el ojo ese famoso de Buñuel,
Es esta condenada impotencia. Esta ausencia hasta de rabia. Este peso.
Es como siempre habías querido estar y no podías hasta que
No puedo leer un solo libro. Una sola página. Un solo párrafo. Ni una línea. No puedo escribir,
Otra maldita tarde de domingo, una de esas tardes que algún día escogeré para colgarme del último clavo ardiendo
Y ahora que estás en España que como ya sabrás
Las 00.30 y heme aquí fumando hasta matarme delante de una pantalla negra con manchas de verde embadurnándola.
Desayunar con Nietzsche es relativamente fácil, sobre todo si hace sol, la lluvia es fina —un ligero chaparrón traslúcido y oxigenado–
Las poéticas son un poco como los preservativos: si te tienes que parar, más vale dejarlo para otro día.
Todo el día queriendo redactar este poema y ahora no recuerdo qué se supone que tenía que decir.