Cuando las secas encinas, álamos y robles altos, los secos ramillos visten de verdes hojas y ramos; y las fructíferas plantas
De una Virgen hermosa celos tiene el sol, porque vio en sus brazos otro sol mayor. Cuando del Oriente
Sentado en esta peña, donde mis tiernas lágrimas se impr… a imitación pequeña de las que el alma y corazón me op… presumo enternecella
«—Mira, Zaide, que te digo que no pases por mi calle, no hables con mis mujeres, ni con mis cautivos trates, no preguntes en qué entiendo
Cuando me paro a contemplar mi est… y a ver los pasos por donde he ven… me espanto de que un hombre tan pe… a conocer su error haya llegado. Cuando miro los años que he pasado…
Gallardo pasea Zaide puerta y calle de su dama, que desea en gran manera ver su imagen y adorarla, porque se vido sin ella
Vengada la hermosa Filis de los agravios de Fabio a verle viene al aldea enfermo de desengaños. A ruego de los pastores
7 Éstos los sauces son y ésta la fue… los montes éstos, y ésta la ribera donde vi de mi sol la vez primera los bellos ojos, la serena frente.
Claro cisne del Betis que, sonoro y grave, ennobleciste el instrumen… más dulce, que ilustró músico acen… bañando en ámbar puro el arco de o… a ti lira, a ti el castalio coro
Gaspar, si enfermo está mi bien, d… que yo tengo de amor el alma enfer… y en esta soledad desierta y yerma… lo que sabéis que paso persuadilde… Y para que el rigor temple, advert…
Esta cabeza, cuando viva, tuvo sobre la arquitectura destos hueso… carne y cabellos, por quien fueron… los ojos que mirándola detuvo. Aquí la rosa de la boca estuvo,
Cuando en mis manos, Rey eterno,… y la cándida víctima levanto, de mi atrevida indignidad me espan… y la piedad de vuestro pecho admir… Tal vez el alma con temor retiro,
Pasos de mi primera edad que fuist… por el camino fácil de la muerte, hasta llegarme al tránsito más fue… que por la senda de mi error pudis… ¿qué basilisco entre las flores vi…
¿Qué tengo yo que mi amistad procu… ¿Qué interés se te sigue, Jesús m… que a mi puerta cubierto de rocío pasas las noches del invierno escu… ¡Oh cuánto fueron mis entrañas dur…
Encaneció las ondas con espuma Argos, primera nave, y sin temella… osó tocar la gavia las estrellas, y hasta el cerco del sol volar sin… Y aunque Anfitrite airada se cons…