El azul estaba inmovilizado entre… El viento iba y venía por la págin… encendía pequeñas fogatas, se revo… salía con la cara tiznada gritando… el viento iba y venía abriendo y c…

Bajo mis ojos te extendías, país de dunas –ocres, claras. El viento en busca de agua se detu… país de fuentes y latidos. Vasta como la noche,

(negra armadura viste el fuego) calorífero de combustión lenta entre las fauces de la chimenea —o mármol o ladrillo—

Como el aire hace y deshace sobre las páginas de la geología, sobre las mesas planetarias, sus invisibles edificios:

Es la hora esperada sobre la mesa cae interminablemente la cabellera de la lámpara La noche vuelve inmensa la ventana

Negro el cielo Amarilla la tierra El gallo desgarra la noche El agua se levanta y pregunta la h… El viento se levanta y pregunta po…

Dentro de un sueño estaba empareda… Sus muros no tenían consistencia ni peso: su varío era su peso. Los muros eran horas y las horas fija y acumulada pesadumbre.

Pulsas, palpas el cuerpo de la noc… verano que te bañas en los ríos, soplo en el que se ahogan las estr… aliento de una boca, de unos labios de tierra.

La noche borra noches en tu rostro… derrama aceites en tus secos párpa… quema en tu frente el pensamiento y atrás del pensamiento la memoria… Entre las sombras que te anegan

Habla deja caer una palabra Buenos días he dormido todo el inv… Habla Una piragua enfila hacia la luz Una palabra ligera avanza a toda v…

Infrecuentes (pero también inmerec… Instantáneas (pero es verdad que e… Hay instantes que estallan y son a… Otros son un río detenido y unos á… Otros son ese mismo río arrasando…

AL ALBA busca su nombre lo naci… Sobre los troncos soñolientos cent… Galopan las montañas a la orilla d… El sol entra en las aguas con espu… La piedra embiste y rompe claridad…

Rodeado de noche follaje inmenso de rumores grandes cortinas impalpables hálitos escribo me detengo

Si tú eres la yegua de ámbar yo soy el camino de sangre Si tú eres la primer nevada yo soy el que enciende el brasero… Si tú eres la torre de la noche

Es grande el cielo y arriba siembran mundos. Imperturbable, prosigue en tanta noche el grillo berbiquí.