Mente serena y fría
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Cuando el reloj detenga sus manija… Cuando sus horas ya estén contadas… Despertarán del sueño, los hijos y… Ya no serán las noches madrugadas. Antes de que se apaguen las luces,
Tengo temor de perder mi encanto Ese toque que sale de mi aliento, Lo que digo, lo digo con un canto Que hace llorar hasta el acento. Tengo miedo de andar en espanto
Era una flor y se llamaba Lorena. Muy bella de extramada constancia, Su hermosura rondaba su rostro Mientras su belleza me acechaba. Decía la quería, y cuanto la amaba
Mi amor es más grande que el cielo Más grande que el universo, Mi amor puede decir te quiero Escrito en un verso. Mi amor es más grande que el mar
Un cuervo da libre saltos Sobre la puerta de un cementerio, Y flota corriente abajo Y se atreve a pisar libre el suelo… Aquí, que abre su pico para cantar…
Si hoy me amas me pregunto? Mañana me amaras? Que me dirán los días Si pasado ya no estás. O dirás que ya no me amas,
Estandarte de mi conocimiento, Luz propia de mi flujo mental, Iluminando vas en tu momento A un simple hombre mortal. Fantasía en la cual yo mantengo,
¡Oh, de mis ojos afortunados Por esa linda mujer que cruza! Cuando pasa por mi ventana Da alegría a mi vida mustia. Y con su encanto me alegra
Gente hipócrita que creyendo que asistiendo a misa o iglesias, van ocultar su rostro sobre sus pecados mundanos, porque del rostro asoma más toda su palabra. Desfila entremezclada la pi...
Celebremos un nuevo día con una nu… La armoniosa ronda que hoy está de… Las rosas nuevas de amatista muy o… Cobija todo mi ser de un sentimien… Estrella que abrillanta la humedad…
Mi mano sostiene el bastón juvenil Tan flexible como la caña; Mientras mi corazón palpita Como un corazón joven sin cana. Durante mucho tiempo, contemple
Ayer que pase por tu casa Por tu jardín de flores de Azucenas, tome unas que Otras entre mis manos y Percibí el olor de florilegios
No entiendo tu pensar, ni tu razón Con ese sentido de amar indeciso, Sin que yo sepa lo que me quiso Decirme tu confundido corazón. Al verme ya caído. En tu pesares
Un rostro natural pintado a mano, Te dio encanto, mi Dios, Lorena Y reflejas en tu rostro manso Un lindo sentimiento, mi dueña. Tus ojos brillan y son muy fieles,
Desde el balcón de mi constancia, Asomado observo a mi amor eterno; En un hermoso día a la distancia Escribo su nombre en mi cuaderno. Me gusta ver su hermosa travesía,