Como la mañana alegre
Reserva derecho de autor.
Gracias por dejarme entrar a tu vida, y formar parte de mi ser, gracias por existir: ¡hermosa mujer!. Gracias por deleitar mis ojos con tan semejante presencia, por tus miradas correspo...
Amé como ninguno, porque valía la… Amar constante, La humanidad que amaba, y, a lado… Entregué todo mi corazón ante el f… Para demostrar, que estoy listo pa…
Si me pides que me olvide lo vivid… Pero dime si tu sabes que es olvid… Más largo es el recuerdo y el olvi… Más frecuente de lo que si es fall… Más loco es olvidar lo que amamos
Hay una lágrima en mi corazón que En el fondo quiere salir, Pero soy demasiado flexible para Poder sostenerla, Pero no dejo que nadie vea en el d…
No se de que enfermedad Padece mi corazón, Si es un virus mortal O quizás es solo amor. Es un dolor exquisito
Mira esa mujer que pasa, su corazó… En sus ojos se advierten sus amore… No lo mires tanto porque podéis qu… Terminarás como yo, pues moriréis… Tiene esa elegancia como cualquier…
Eva por la serpiente es provocada, Con la manzana roja y provocativa, Le dice Adán con la frente altiva Que confiada dice no pasará nada. Tentadora en sí no eres culpable?
No me digas más... amor, que me ha… Porque no te das cuenta? que yo te… Tu alma aventurera... no vale nada… Que alguien como yo te quiera. Cuando se haya. El alma enamorada…
De mis raíces, ha nacido, Sangre de buen tenor. Yo digo, bien merecido, Usarlas con buen fervor. Pido ternura, siempre,
Usted bien sabe cuanto la quiero Cuando la miro a los ojos Al instante parezco que muero Delirando como los locos. Si alguna vez me advierte
Quiero que me escuches, mis última… Las que yo te canto como un recuer… Un recuerdo santo, que lleve mi me… Y no olvide nunca, aunque no esté… Tu sabes que te quiero con toda mi…
Desperdicie mi juventud en La prematura soledad, en Aquel lejano horizonte Donde los caminos no se Cruzan jamás.
Cuando hablamos con los labios Fue hablar con nuestros ojos, En ese amor de los sueños Fue lindo hablar de nosotros. Cuando volví de la fantasía
Había una vez un rey que le dijo a su hija la princesa que ya era hora de que ocupará su lugar y la princesa le respondió: –Padre aún soy tan joven para tener responsabilidades y quiero...
Yo que soy un hombre de cuidado Me deje clavar el puñal del dolor, Con mi corazón desamparado Soy un poeta, triste amador; Que da poesía, pero no amor.