Me fui acercando hasta la lúgubre frontera de la llama, todavía reciente el maleficio. Dioses en vez de hombres arrancaban a la terrestre boca sus rescoldos

Por los feudos del río Guadalete, ya en las cercas de espinos del cañaveral del Charco, aún subsisten los ruinosos porches de una casa

Ningún vestigio tan inconsolable como el que deja un cuerpo entre las sábanas y más cuando la lasitud de la memoria

Entra la noche como un trueno por los rompientes de la vida, recorre salas de hospitales, habitaciones de prostíbulos, templos, alcobas, celdas, chozas,

Siento pasar los barcos por dentro de la noche. Vienen de un transito… distrito del invierno y van a otra… estación de argonautas, esas rutas

Vana interrogación la del que lleg… al Danubio a deshora y busca la memorable isla donde otro exilio más cruel que el del o… purgara Garcilaso.

Por el camino se me van cayendo frutas podridas de la mano y voy dejando manchas de tristeza… donde quiera que piso; un pájaro amanece ante mis ojos

Oigo a veces, en sigilosas noches otoñales, una oblicua graduación d… provenientes de Argónida. Es como un rastro agreste de hermosura y pavor, como…

Defenderé el recuerdo que me queda de aquella calle inhóspita detrás de la estación de Copenhagu… Defenderé contra mí mismo ese recuerdo, cuando

Desde un lugar que aprendo a recorrer cada mañana, vuelvo sobre mis pasos y te espero allí donde estoy solo. Matinal

De aquellas arduas clandestinidade… tenazmente debidas a causas nobles y amorosos lances, sólo te queda un sedimento entre feliz y melancólico, la sens…

Mil veces he intentado Decirte que te quiero, Mas la ardorosa confesión, mi vida… Se ha vuelto de los labios a mi pe… ¿Por qué, niña? Lo ignoro,

Un decorado basta para manchar la vida. Puede ser que las cosas no sucedan así, que las veamos ajenas a su pr… poder de persuasión desde el preca…

Nunca serás ya el mismo que una ve… convivió con los dioses. Tiempo de benévolas puertas entornadas, de hospitalarios cuerpos, de excit…

Posiblemente es tarde, pero ¿cómo poder atestiguarlo mientras Hortensia canta y no se o… más que su grito de musgosa lascivia y alguien