#Españoles
Guarda mi corazón el balanceo de las altas palmeras, que un aire… agita en la noche benigna. Siento en mí sus raíces nutrirse d… y que sus altos troncos, ingrávido…
Yo rodaba a tu suerte por la lader… éramos un ovillo, una hoguera ence… dos cuerpos que rodaban desnudos h… carne fresca y elástica que el amo… Recuerdo que las risas no nos impo…
He vuelto a la blancura dolorosa de las amadas cumbres, que guardaron con celo los días de la lejana juventud. Aquellas blancas cimas que escondí…
Este sol va dorando lentamente mi… que es un raro navío que ha perdid… de tristeza se duelen abatidos vel… porque la brisa esconde su ráfaga… Esta tarde se incendia lentamente…
Desde la torre observas cómo cae l… las últimas montañas perdidas con… los árboles que ascienden levement… el fulgor de los astros que brilla… Cerca quedan las playas del Sur,…
En las noches lascivas, amables, s… nos miran desde el lecho vibrantes… desde el lecho que ha sido la gónd… donde el amor dejaba sus rosas esc… En las noches lascivas nos miran i…
Si el tiempo me persigue me ocultaré en el mar, regazo inmenso que me envuelva lejos de las orillas. Allí,
Hubo una flor, un lecho donde aprendiste pronto la sombra del deseo, la juventud de un cuerp… vencido como nave, la soledad que el alma dejaba en otra frente.
Por los aires sombríos de la noche de octubre va mi dolor
Yo noté que apretabas, Florinda,… que tus manos me hacían resbalar h… que tu poma dulcísima me estallaba… y tus brazos me alzaban para siemp… Yo noté que rondaba tu manzana red…
Cantan dulces baladas con los labi… tienen los corazones rotos por el… llevan gemas sombrías en sus dedos… y en sus frentes que un astro porq… En las noches siniestras beben su…
Del mar, en los adentros, donde las aguas refulgentes, aún c… espejean por el astro más bello qu… vide aquella barcaza donde los dos… y cómo discurría lentamente.
Contempla allá esa luz que hacia el poniente es sangre. Esa luz que parece inventarse la c… en sus atardeceres. Distinta cada… contémplala desde aquí y mira cómo…
Asisto al despertar del nuevo día en las hermosas playas de Kovalam. Saludan a mis ojos las palmeras agitando sus ramas solemnes como b… y el mar, el Mar de Arabia, con s…
Una noche en París me raptó Marie… me tomó de la mano, me llevó a su… me tendió sobre un lecho, se quitó… y mostró sus encantos, que eran di… Derramó sus oscuros cabellos sobre…