Tutto per tutto
Despierto y todo está oscuro,
mi rostro se clava en lo inmenso,
se clava en lo absurdo,
no veo ni mis propias manos,
la nada es el todo, lo inconcluso,
leí non l’aveva voluto,
lo sé ahora, eramos il tutto per tutto
el vacío y el todo más absoluto.
En ese vacío oscuro vivo
donde se reflejan escenas obscenas
representando vidas plenas,
pero y ¿que es de mi vida
ante esa oscuridad que me llena?
esa oscuridad que me invade
y que retorna en forma de horma
que deforma amores y sombras.
Pero creo saber ya que es esa sombra,
viendo la oscuridad como un rectángulo
aparece en la parte superior izquierda
una luz inquieta que parpadea y que
menciona mi nombre que a su vez
rima con código morse y morgue,
pero ¿porque? si no soy aquel Dios
que creé sino que solo soy un hombre.
Embaucado, intentando descifrar lo indescifrable, el mensaje de aquella luz,
la respuesta estaba clara, se veía en mi cara, pulsé el botón y encendí la pantalla
y la luz del celular se hizo brillar
mientras una voz por detrás suspiraba y decía enfadada ¿otra vez igual?
Lo ultimo que miras por la noche y lo primero en la mañana, teniendo todo a tu alrededor y nada en absoluto,
leí non l’aveva voluto,
lo sé ahora, eramos il tutto per tutto...
