Ya sólo eres aquella que tiene la costumbre de ser bell… Ya pasó la embriaguez. Pero no olvido aquel deslumbramien… aquella gloria del primer momento,

Yo sé que tú eres de otro. Y, a p… Y espero sonriente, porque yo sé q… como en amor el último vale más qu… tú tendrás que ser mía. Yo sé que tú eres de otro, pero es…

Otra vez tus caminos me llevan hac… cuando ya en mi sonrisa murió el ú… Otra vez esa flecha clavándose en… y esa lluvia de otoño para soñar c… Otra vez esas manos alzándose haci…

Desde este mismo instante seremos… por estos pocos días, quien sabe c… yo seré en tu recuerdo como un lib… uno de esos que nadie confiesa hab… Y así mañana, al vernos en la call…

La vida pasa; la vida rueda... Quizás se aparten tu alma y la mía… pero el recuerdo nace y se queda..… Y aunque el deseo no retroceda y nuestra llama se apague un día,

¡Y ante mi abrazo te sentí rendida… y ante tu sumisión, mis besos sabi… pusieron a temblar entre tus labio… ansias de amor y de placer y vida!… Fue un instante no más, uno de eso…

Se deja de querer... Y no se sabe porque se deja de que… Es como abrir la mano y encontrarl… Y no saber de pronto que cosa se n… Se deja de querer...

Todavía te busco, mujer que busco… mujer que tantas veces cruzaste mi… sin alcanzarte nunca cuando extend… y sin que me escucharas cuando dij… Y, sin embargo, espero. Y el tiem…

Está bien, vas con otro, y me apen… pues recuerdo las noches que tembl… como tiembla en la hoja la humedad… o el fulgor de la estrella que des… Te perdono, y es poco. Te perdono…

Somos agua, aire y sal, como la es… Tentativa del viento para variar s… Mi cuerpo se estremece de vapor de… aún sujeto al influjo de remotas m… Somos hijos del mar, peces con pie…

Las riendas de mi vida las sujetan… y aunque impacientes piafan mis po… con tus débiles músculos los somet… mis intentos de fuga, oyendo los l… relinchos de otros potros, que ent…

Como tantas cosas lejanas que se acercan sin un rumor, llegaron las primeras canas y quizás el último amor. El amor que pasó deprisa,

Ahora que ya te fuiste, te diré qu… Ahora que no me oyes, ya no debo c… Tú seguirás tu vida y olvidarás pr… Y yo aquí, recordándote, a la oril… Hay un amor tranquilo que dura has…

—“Vamos, que se hace tarde...”—me… Pero yo me quedé mirando el mar, con el hastío de un pecado triste, pues no hay nada más triste que un… Tú, la mujer ajena.

Dejé mi copa en el brocal maldito. Grité hacia abajo, hacia el profun… pero el coro sarcástico del eco me devolvió multiplicado el grito. Llegaba tarde: el pozo estaba seco…