Quereres de red
Quereres de red, grandes quereres
sin abrazos ni manos en la piel,
sin suaves versos con sabor a miel,
saben quién eres sin saber quién eres,
y si quieres proclamas a quien quieres,
y dejas de querer sin culpa o hiel,
y si te eclipsas sigues siendo fiel,
cuando a ti te requieren tus deberes.
Quereres en la red, de lontananza,
en diálogos monólogos escritos,
con lenguajes de amor, de buena crianza,
de sentencias medidas, cero gritos,
que a la larga nos dejan su enseñanza:
son cariños de ley, que no son mitos.
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