#Mujeres #PremioCervantes #SigloXX #Uruguayos
Corta la vida o larga, todo lo que vivimos se reduce a un gris residuo en la memoria. De los antiguos viajes quedan las enigmáticas monedas
Expectantes palabras, fabulosas en sí, promesas de sentidos posibles, airosas, aéreas,
¿Cumplimentar al dios de los princ… de las solares astucias, en la sombra, si todo signo se interrumpe? ¿O, sorda, perseguir un recuerdo
En una luz verdosa, entre olores v… en un vestido negro como papel que… la abuela se refleja desde la mece… al fondo del espejo. Allí sentada no se hamaca. Cruje.
Están aquí y allá: de paso, en ningún lado. Cada horizonte: donde un ascua atr… Podrían ir hacia cualquier fisura. No hay brújula ni voces.
Érase un bosque de palabras, una emboscada lluvia de palabras, una vociferante o tácita convención de palabras, un musgo delicioso susurrante,
Uno más uno, decimos. Y pensamos: una manzana más una manzana, un vaso más un vaso, siempre cosas iguales. Qué cambio cuando
Como tras los mullidos ves tres ga… a su trisagio erótico ceñidos, saltar por los tejados, aguerridos como otros d ' Artagnan, Porthos… pasas a depender, no de insensatos
Otoño, perro de cariñosa pata impertinente, mueve las hojas de los libros. Reclama que se atienda las fascinantes suyas,
¿Se hieren y se funden? Acaban de dejar de ser la lluvia. Traviesas en recreo, gatitos de un reino transparente, corren libres por vidrios y barand…
La palabra infinito es infinita, la palabra misterio es misteriosa. Ambas son infinitas, misteriosas. Sílaba a sílaba intentas convocarl… sin que una luz anuncie su dominio…
Y tienen las palabras su verano, su invierno, y tiempos de entretie… y estaciones de olvido. De pronto se parecen demasiado a n… a manos que no tocan
Sólo tendremos lo que hayamos dado… ¿Y qué con lo ofrecido y no acepta… qué con aquello que el desdén redu… a vana voz, sin más, ardiente ántrax que crece,
Ponerse al margen asistir a un pan cantar un himno menoscabarse en vano abrogar voluntades
En el aire estaba impreciso, tenue, el poema. Imprecisa también llegó la mariposa nocturna, ni hermosa ni agorera,