silencio: oscuridad que ensordece…
Tantos ángeles deben de seguirme e… para oír, del diálogo profundo, al demonio.
De nuevo, de buenas a primeras digo: giro en tu ombligo, en espiral hiriente, gravedad que destina
quien huye del desierto, de la tragedia, ve abrirse ante él un oasis, ilusión de prisión, donde, como mano de niebla fría o como nube llena, gorda, que haya prometido luz de rayo en su ...
...y cuando la velocidad se ralent… (a la mañana de palomas fugaces) y el corazón apocado, escaso de palabras dulces, muera la sangre extranjera que viv…
Entre el ruido primario de las got… ¿Cuándo comienza la palabra llu…
Aunque esté solo, no estoy solo: otros estarán solos. Otros tomarán café en la tarde y s… que otros se hablan mientras miran… que otros, también, piensan en la…
Luego, por la tarde, las veredas d… Desatando del ruido las palabras e… en el tiempo que no para. En la tarde enmarcada donde se cru… pensando, decidiendo, entre mis pi…
Me late el corazón cuando la vida… pulsación de la mañana en la mader… calor, la brasa, tibia canción. El corazón era más que una palabra…
Piensa en tus pies, siéntelos; en tus huesos, tus rodillas; en tus muslos y en el vientre
Moriremos un día en el que el té se seque sin su ag… en el que no hagamos café sin bastante azúcar. Moriremos, lo sabemos,
Lees y relees aquel poema de palabras tan generales y, a la vez, exactas. Lees con tus ojos, con el designio natural que a la poesía uno otorga. Increíble, pero las palabras se empiezan...
juguemos el juego del deseo y la f… la sangre que circula sobre sangre… el agitado latir que nunca se toca… la espera cercana que desespera y… lo que destruirá con sombria venga…
Tú, el que me lee ahora, eres un m… te retuerces como lombriz en la os… es tu paso ciego un tunel y un agu… pero en el sueño de la lluvia sale… eres cenizas en el corazón de un f…
Cuanto más me miro más lejos estoy… Y cuanto más me escucho, más susur… Mi inocencia ahora es nostalgia. Las estrellas me llaman y tengo po… Moriré antes de cumplir cualquier…