los dos ojos son cuatro ojos que miran a los costados, delante, detrás; el rostro de la espalda es el rost… que mira a través del frente que e…
Aunque la tristeza golpee suavemen… apunta a lo más frágil. nacer bajo tantas estrellas para estar encerrado en una casa; morir bajo tantas estrellas
Otra promesa se cumple. De nuevo, la luz regresa. La oscuridad era débil, aunque con… Y todo era simple como el cielo.
...he de encontrar todas las puert… pasar a la noche, a las horas; seguir sin caminar, seguir sin ell… seguir sin vacilar todos sus instantes...
A las cajas con cabezas les gusta el sonido de los bordes. El establecimiento de lo eterno en la sociedad de los Sin Nombre. La suprema rima de los sonetos,
en el mismo pedazo de cubo que son… los límites de mis ojos escribo sobre una tabla, en un met… la performance que enmascara mi tr… soberbio
Sé que he sido, por largos instantes, mi propia luz; y he, con el índice feliz del curioso,
Si me vas a herir que duela: no tolero el sonido de una campana sin su eco; tampoco no levantar mi vista
La realidad golpea con la fuerza de un martillo a los poetas a los soñadores a los enamorados
Miré hacia arriba, en el colectivo, firmemente al cementerio de mosquitos: sus cuerpos abandonados
Gustavo:—Devorar, María, tus siluetas, como la pequeña luz a las infinitas sombras,
El futuro esconde la muerte, los inevitables cambios. Como un cofre bajo el océano, y yo debo ser el océano.
Había una razón de ser entre tanto guiso de hilos, pero tenía que perderla. Tenía que perderla, hilando fino, estirando el suéter,
...y... pero... roto sol sin embargo, luz negra tras la ima… abismo que vomita superficialidade… tan magnificentes:
Nadie quiere al poeta que llora al poeta que deprime dan tantas palabras que al fin son sólo eso... nadie lo quiere, pobrecito.