OTRO TIEMPO
Lo Que Construimos
Contamíname con tu mirada,
con el pálido latir de tus palabras.
Contamíname hasta que no quede nada
nada de mí, ni de ti, ni de nosotros.
Ven, ven tan despacio que casi no pueda sentir los días
y necesite refugiarme en la memoria,
ven tan de prisa que no pueda sentir tu olor
y tu tacto sea ligero como la brisa.
Vete y que no quede huella de lo que fuimos,
de esa imagen rota y desdibujada de nosotros mismos.
Vete recitando sin ritmo nuestra canción del final
de nosotros que casi sin tiempo ni lugar juraste lanzar al viento
y que llegó mucho antes de dividir nuestros caminos.
Ahora lejos no voltees a ver,
deja que las fotografías nunca reveladas
y las divulgadas se vuelvan transparentes,
deja que la luz del nuevo día se las vaya comiendo de a poco.
Que se queden las cuatro promesas nunca pronunciadas
derritiéndose gota a gota,
que la vela que le prendí a los santos astros
se queme perpetuamente hasta el fin del amanecer
y que estas letras sean las palabras que pronunciamos
una y otra vez
una y otra vez hasta que ya no tenían sentido
hasta que sonaran absurdas
Que se joda todo lo que una vez fue
y al mismo tiempo repose cual templo,
así podré revisitar sin dejar de descubrir una nueva fuente,
una nueva coma, una imagen que se encontraba sola
oculta por la prisa y la risa absurda
Esta historia me quebró de principio a fin
y me dejó siendo otra.
Una versión que no se agota.
