Óyeme, mamacita, a que no te imaginas, a que no me adivinas, lo que tu indito te trae aquí. Son nada más dos cosas:

Hubo un Rey en un castillo con murallas de membrillo, con sus patios de almendrita, y sus torres de turrón. Era el Rey de Chocolate

Allá en el viejo bosque hay una casita, si vas allá te has de asomar, y por la ventana

Metida en su casita con su gorra y… estaba Doña Zorra ocupada en reme… pero su teléfono no deja de llamar… y corre al audífono para preguntar… Riiing Riiing

Los cochinitos ya están en la cama… muchos besitos les dio su mamá, y calientitos, todos con piyama, dentro de un rato los tres roncará… Uno soñaba que era rey

Con su garrote, con su morral, viene un conejo por el trigal. Animalejo, ven hacia acá, ¡hola, conejo! ¿cómo te va? Conejito, ¿Cómo te llamas

Los conejos mañaneros se levantan los primeros, y moviendo las orejas se van. Van al horno pues les gusta

Van los novios en camino a la iglesia del lugar: son dos blancas palomitas que se van a casar. La paloma es preciosa

Salta que te salta por el bosque, iba Doña Ardilla con una sombrilla azul, entre la fragancia de los pinos y el perfume de eucaliptos y abedu…

Hoy pasó un chivo arrastrando un carricoche que sonaba al viajar. En sus cuatro ruedas, un derroche de campanas

Hay un pato bizco que se cae a cada rato; hombre, pobre pato ¡con los ojos al revés! Pero es un buen amigo

Abuelito... (¡Voy! ¡voy!) Ven a contarme algún cuento de esos mil que tú te sabes y que trate de misterio o de amor.

Dando, dando de vueltas, los caballitos del carrousel saltan repiqueteando su cascabel. Patos, perros y gatos,

Hay un castillo en España al cual sólo ruinas le quedan en p… y se cuenta que ronda por él un fantasma más grande que un buey… Ante tan negra leyenda

Don Perfidio Malaentraña, hechicero de postín, como los de su calaña es malvado, bajo y ruin. En las sombras de la noche,