cuando llegue septiembre
volverán los anhelos a encontrarse
respiraré de nuevo con tu risa
cuando llegue septiembre
los dorados destellos del ocaso
harán que se disipen mis agobios
respiraré tranquilo en mi ignorancia
sabré reconocer lo imprescindible
y volaré muy lejos
sin duda
hacia parajes más tranquilos
cuando llegue septiembre