#Españoles #Fábula #SigloXVIII
Sin Rey vivía, libre, independien… el pueblo de las ranas felizmente. La amable libertad sola reinaba en la inmensa laguna que habitaba; mas las ranas al fin un rey quisie…
Dos machos caminaban: el primero, cargado de dinero, mostrando su penacho envanecido, iba marchando erguido al son de los redondos cascabeles.
Habiendo a su rival vencido un gal… quedó entre sus gallinas victorios… más grave, más pomposo, que el mismo Gran Sultán en su se… Desde un alto pregona vocinglero
Meditando a sus solas cierto día un pensador filósofo decía: «El jardín adornado de mil flores, y diferentes árboles mayores, con su fruta sabrosa enriquecidos,
Cierto artífice pintó una lucha, en que, valiente, un Hombre tan solamente a un horrible León venció. Otro león, que el cuadro vió,
El único sobreviviente de un naufragio fue visto sobre una pequeña isla inhabitada. El estaba orando fervientemente, pidiendo a Dios que lo rescatara, y todos los días revisaba el horiz...
Cantando la cigarra pasó el verano entero sin hacer provisiones allá para el invierno; los fríos la obligaron
Salió cierta mañana Zapaquilda al tejado con un collar de grana, de pelo y cascabeles adornado. Al ver tal maravilla,
Un joven educado con el mayor cuidado por un viejo filósofo profundo, salió por fin a visitar el mundo. Concurrió cierto día,
Asustadas las liebres de un estrue… echaron a correr todas, diciendo: «A quien la vida cuesta tanto sust… la muerte causará menos disgusto.» Llegan a una laguna, de esta suert…
Un milano después de haber vivido con la conciencia peor que un fora… enfermó gravemente. Supuesto que el paciente ni a Galeno ni a Hipócrates leía,
Llevaba en la cabeza una Lechera el cántaro al mercado con aquella presteza, aquel aire sencillo, aquel agrado, que va diciendo a todo el que lo a…
De los confusos pueblos apartado, un anciano pastor vivió en su choz… en el feliz estado en que se goza existir ni envidioso, ni envidiado… No turbó con cuidados la riqueza
Dos ranas que vivían juntamente, En un verano ardiente Se quedaron en seco en su laguna. Saltando aquí y allí, llegó la una A la orilla de un pozo.
¿A qué pena condenas a tu brazo, bárbaro ejecutor de tal porrazo?" “Al que obra con malicia, le respondió el varón prudentement… rigorosa justicia