¿Por qué has de menospreciar tu be… Tan pródiga y espléndida cual el s… ¿Por qué ocultar, cual flor en la… El don inestimable de tu belleza s… Esa tez de alabastro, esos ojos br…
Adiós, oh año que parte el viento, dejando sueños en la marea, la luna observa tu lento paso, tu sombra queda en el firmamento, y en los relojes tu fin se crea.
En el corazón del mundo donde la tierra canta, los ríos llevan sueños y el viento, esperanzas. Caminan hombres sencillos
Por las orillas del río canta el agua su canción, con un murmullo sereno que acaricia el corazón. Las estrellas en el cielo
Ha girado el mundo sin rumbo ni su… los días se enredan en horas incie… y las puertas, abiertas o ya desie… se olvidan del norte, perdidas al… Giran palabras como un caramelo,
Hablando de amores pasados, de aquellos que dejan heridas, sentados en una cantina, me puse a contar mi verdad. Les dije que el alma se cansa,
En la calma que se aferra a la sombra del ocaso, hay un eco que se asienta en los pliegues del fracaso. Las horas se deslizan lentas,
Al cabo de los años, he visto con… que el mundo es un espejo de un mí… La luz en la arboleda, sus ráfagas… convierten la existencia en llama… He hallado en la ribera del río ru…
Soy la suma de todos mis fracasos, De los sueños rotos y los pasos en… Soy el resultado de cada lágrima d… De cada noche en vela, de cada mad… Soy el peso de las cargas que he l…
Mi palabra se eleva al viento, como un eco suave y fugaz, es un canto que desafía el tiempo, un destello de inmensidad. El mar guarda secretos antiguos,
Señor, te entrego mi voluntad, en tus manos pongo mi destino. Guíame con tu bondad divina, ilumina mi camino. Hazme fuerte en la adversidad,
Yo soy la mujer renaciente, que se alza de las cenizas del sil… que irrumpe con fuerza incontenibl… desde los márgenes del olvido. Yo soy la voz que se alzaba en sus…
Niebla en la plaza y su gris dista… calles dormidas, viento que murmur… la vida es eco de un sol menguante… Sombras que envuelven la torre seg… en sus campanas susurra un suspiro…
No renuncies jamás a la poesía, ni al fulgor inmortal de la palabr… que en tus manos, con dulce melodí… teje luces que el tiempo nunca lab… Escribe siempre, aunque el eco en…
El asfalto se extiende como un río de sombras, cada línea blanca una frontera incierta, cada curva,